Querido amigo:                          

                      Te escribo desde el planeta Tierra ¡Qué lugar más raro! Primero que nada,  confirmo la teoría del maravilloso lugar que es. Hay también vida, ‘’humanos’’ se les llama por lo que escuché.

  Además, te comento que mi estadía acá está siendo muy rara e increíble. Esta raza es muy, muy, particular, luego te contaré detalladamente sobre los lugares, cosas, costumbres y sentimientos que tienen estas personas, como así también se les dice.

   Más que nada te escribo para resaltar el tema de alimentos que ingieren. Es un paraíso de variedades de comidas ¡Algún día tenés que venir! Lo que más me gustó de esto son los alimentos llamados ‘’dulce’’ que se comen como ‘’postres’’. (¡Si tendrán imaginación para inventar nombres!) No puedo contar en palabras lo deliciosos que son, todos y cada uno, de cualquier forma y sabor. Pero la verdad es que hay un postre que me llamó la atención más que ninguno. Es ‘’lo más rico del mundo’’ según mis amigos los terrícolas... ¿Cómo explicarte? Es frío, tiene una especial contextura cremosa y sus sabores pueden variar de frutales, (sí, acá también hay frutas) de cremas, o mi favorito, el de ‘’chocolate’’. Cada cucharada es la gloria. Y no te creas que este placer de comerlo es solo mío. Los humanos lo aman, dicen que ayuda al alma, y la verdad es que sí, comerlo da una felicidad enorme, menos a las mujeres, quienes dicen que las engorda, aunque sinceramente, no sé a qué se refieren.

  En fin, era para contarte que algún día vendremos a la Tierra a disfrutar de este maravilloso invento del hombre.

  Espero irme pronto de este planeta. (No sin antes hacer una última degustación).

                                                           

 

                                                                   Saludos, tu querido amigo marciano.

 

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